Mejor visión con un par de gafas nuevas.
¿Qué es lo más importante de unas gafas personalizadas? Conocer cómo interaccionan los ojos del usuario.
Dirk Siemsen es un óptico cualificado y propietario de Mahrt und Hoerning en Göttingen (Alemania). Su nueva paciente llevaba más de 30 años usando gafas. Tenía problemas de visión nocturna y en 3D, se quejaba de sensibilidad a la luz durante el día y era miope. Desafortunadamente, ninguna de sus gafas le había procurado la nitidez de visión que necesitaba a largo plazo. MEJOR VISIÓN quiso averiguar cómo dio finalmente con el par de gafas adecuado y por qué fue tan importante revisar su visión binocular para encontrar una solución.
MEJOR VISIÓN: ¿Qué hizo de especial para esta paciente en particular?
Dirk Siemsen: A decir verdad, esta paciente no fue un caso especial para Mahrt und Hoerning. La pregunta clave para cada uno de nuestros pacientes es: ¿qué hace que su visión sea única? Dentro de lo posible, intentamos optimizar la visión de cada uno de nuestros pacientes utilizando todos los medios a nuestro alcance para alcanzar máxima agudeza visual. Invertimos mucho tiempo en este proceso.
Empezamos con una revisión exhaustiva de los antecedentes médicos. Les preguntamos sobre sus hábitos visuales, tanto en el trabajo como durante su tiempo libre. Averiguamos qué tipo de problemas visuales tienen. También les preguntamos si padecen ciertas enfermedades que pueden condicionar la visión, si han estado sometidos a mucho estrés o si han tenido dolores de cabeza o tensión muscular. Y, si es así, cómo se manifiesta el dolor de cabeza, por ejemplo. A continuación analizamos su rendimiento visual con el dispositivo i.Profiler, examinamos la parte posterior del ojo con el retinógrafo, especialmente la cabeza del nervio óptico, y comprobamos si hay cataratas… Naturalmente, el oftalmólogo se encarga de tratar cualquier dolencia ocular. En nuestro caso, comprobar la transparencia y el rendimiento de los ojos es una fase preparatoria para el procedimiento de refracción. Para nosotros es muy importante trabajar en estrecha colaboración con los oftalmólogos.
También es importante observar la postura del paciente. Es fácil hacerlo en la sala de refracción durante la revisión ocular. ¿Podrían algunos movimientos de cabeza y cuello influir en la visión? Esto nos permite extraer las primeras conclusiones. Y esto fue exactamente lo que pasó con la paciente de la que estamos hablando.
MEJOR VISIÓN: ¿Qué notó de particular con esta paciente?
Dirk Siemsen: Al revisar su historia médica, nos comentó que sufría dolores de cabeza frecuentes. También observé que, cuando enfocaba la vista en las tablas de refracción, ladeaba la cabeza ligeramente. Solía sufrir deslumbramientos con frecuencia y se sentía muy sensible a la luz durante el día.
Como hacemos con todos nuestros pacientes, comprobé su visión binocular, es decir, como se coordinan ambos ojos. Utilizamos el dispositivo i.Polatest y las diversas pruebas que este incluye. Al principio, la paciente solo veía nuestras pruebas de 3D en una dimensión. El ojo dominante asumía el control. La imagen proveniente de ambos ojos no se proyectaba correctamente en la misma posición en la retina. Al solaparse, las dos imágenes presentaban alturas distintas. El cerebro de la paciente no podía interpretar la imagen en 3D. La imagen aparecía plana y unidimensional.
Todas las personas somos distintas y eso significa que los ojos no siempre dirigen la vista hacia adelante como debieran.
MEJOR VISIÓN: ¿No miramos todos directamente hacia adelante?
Dirk Siemsen: Todas las personas somos distintas y eso significa que los ojos no siempre dirigen la vista hacia adelante como debieran. Por ejemplo: para una persona que lleva gafas, los ojos pueden mirar ligeramente hacia afuera cuando están en reposo. Esto quiere decir que el ojo dominante, que todos tenemos, utiliza los músculos para posicionarse de modo que dirija la visión hacia adelante. El ojo no dominante se adapta a esta situación. La imagen generada por ambos ojos no es perfecta, pero nuestro cerebro la ajusta para que lo parezca. Esto no representa un problema para todo el mundo, pero a largo plazo puede causar tensión a muchas personas. Perfeccionando los cristales de las gafas para la interacción de ambos ojos, conseguimos mantener un rendimiento visual elevado y reducir la tensión para el paciente. Piénselo, un error de tan solo 0.25 dioptrías en una lente para una visión binocular puede producir una pérdida de rendimiento visual de hasta 30%. Por eso tenemos que trabajar con precisión y comprobar la interacción de los dos ojos corregidos para cada dioptría durante la revisión. Si cambio algo en el ojo izquierdo, también afecta al derecho...
MEJOR VISIÓN: ¿Y qué pasó exactamente con su paciente?
Dirk Siemsen: En su caso, padecía lo que denominamos un descentrado vertical. Sus ojos no gozaban de una visión normal óptima, tanto desde un ángulo como desde arriba. Y esto le causaba problemas a largo plazo. Tampoco contaba con las lentes apropiadas para compensar este defecto. Aliviamos su tensión ocular incorporando prismas en los cristales para corregir este defecto, que se conoce como heteroforia.
MEJOR VISIÓN: ¿De verdad la heteroforia asociada podía haber sido un problema durante 30 años?
Dirk Siemsen: El diseño de los ojos y la longitud de los músculos oculares están programados genéticamente y son hereditarios. Durante la infancia y la juventud, todavía se pueden compensar ciertas deficiencias. Pero esta capacidad disminuye con la edad y durante periodos particularmente estresantes de la vida. En ocasiones esa tensión se puede manifestar en forma de dolores de cabeza o de tensión muscular, pero los síntomas desaparecen y no vuelven a ser perceptibles hasta la vejez.
MEJOR VISIÓN: Los expertos discrepan sobre cómo corregir la heteroforia asociada. ¿Por qué? Algunos incluso advierten de que llevar gafas con prismas puede crear "adicción".
Dirk Siemsen: Es cierto. Para mi, lo más importante es si hemos ayudado al paciente. No solo fuimos capaces de ayudar a esta persona en particular. En este caso, sus continuos dolores de cabeza desaparecieron tras un periodo de adaptación de dos semanas, así como la sensación incómoda de que sus gafas no eran ideales para cualquier situación. Su sensibilidad a la luz durante el día se redujo considerablemente. Incluso me preguntó si desarrollaría una adicción a sus gafas. La respuesta era sencilla. Le dije que si decidía no llevar estas gafas nuevas, su visión seguiría siendo igual que antes. No podía decir otra cosa.
Por tanto, nos tomamos el tiempo suficiente para debatir los antecedentes médicos del paciente, llevar a cabo el proceso de refracción y aconsejar a nuestros pacientes tras la compra de las gafas.
MEJOR VISIÓN: ¿Cuáles son los aspectos más importantes de su trabajo como óptico? ¿Cómo lo resumiría?
Dirk Siemsen: En primer lugar, estamos interesados en las necesidades particulares de cada uno de nuestros pacientes. Hacemos todo lo posible para mantener un rendimiento visual elevado y, si es necesario, reducir la tensión. Por tanto, nos tomamos el tiempo suficiente para debatir los antecedentes médicos del paciente, llevar a cabo el proceso de refracción y aconsejar a nuestros pacientes tras la compra de las gafas.
¿Qué es la heteroforia asociada?
Si la visión binocular es normal, los dos ojos ven el objeto de forma idéntica. Con heteroforia asociada, existe un desequilibrio en los músculos oculares que requiere una gran cantidad de energía de la persona que la padece para posibilitar la visión. Si los ojos adoptasen la posición más relajada, posiblemente el resultado sería una visión doble. Las personas que padecen heteroforia asociada están sometidas a la pulsión (involuntaria) de compensar este problema visual, lo que produce toda una serie de problemas. La comparación más cercana es una desviación de la estructura corporal normal, por ejemplo, una pierna ligeramente más corta que la otra. Esto suele producir dolores de espalda y tensión muscular y es fácil de equilibrar mediante una suela adecuada en el calzado. Los lentes con prismas pueden compensar la heteroforia asociada.