La fotografía con gafas
Obtener unas fotografías excelentes o triunfar con las instantáneas no supone ningún problema para los usuarios de gafas
Cuando llega el momento de fotografiar, como es natural, todo fotógrafo intenta fijar la vista lo más cerca posible del visor para obtener el mejor plano. Sin embargo, esto no es posible para las personas que usan gafas. Si usted es una de ellas, tenga presente que aunque lleve gafas también puede hacer unas fotografías espectaculares si toma nota de unos cuantos detalles.
Hay personas a las que les encanta fotografiar paisajes de ensueño, mientras que otras prefieren retratar a personas. La fotografía es uno de los hobbis con mayor número de aficionados en el mundo entero. Las personas con gafas suelen tener que enfrentarse a una elección difícil: ¿hago mis fotos con o sin gafas? En caso de hacer fotografías con un teléfono inteligente o una cámara digital sencilla, no hay dilema posible: basta con mirar la pantalla y pulsar el botón. Las modernas cámaras digitales réflex de único objetivo (SLR) permiten fotografiar con y sin gafas.
Cámaras con lentes correctivas
Con una cámara digital SLR, la dioptría del visor puede ajustarse adecuadamente a la propia visión del fotógrafo. En tal caso, aproximadamente el 90 % de todos los usuarios se desenvuelven perfectamente sin sus gafas. No obstante, comprar una de estas denominadas lentes correctivas solo vale la pena en caso de padecer una gran deficiencia visual (una dioptría superior a 6). La lente correctiva va atornillada al visor y, de este modo, permite al usuario ver claramente a través de él, sin necesidad de gafas.
Asimismo, numerosas cámaras digitales SLR incorporan una función LiveView: la pantalla posterior muestra directamente lo que ve el sensor digital y lo que se guarda como fotografía en el momento en que se pulsa el botón del obturador. A modo de control final y para asegurarse de que la imagen esté centrada, enfoque el objeto con la función de amplificación. De este modo podrá estar seguro de haber fotografiado el objeto perfectamente. Muchas cámaras compactas y de sistema sin espejos únicamente disponen de pantallas de este tipo para visionar el objeto. Sin embargo, en condiciones de luz solar intensa, estas pantallas quedan en clara desventaja frente a un visor. Únicamente el fotógrafo equipado con un visor gozará de una visión clara y libre de reflejos a través de la lente.
Las personas con presbicia cuentan con una clara ventaja cuando fotografían sin gafas. Es cierto que no ven muy bien de cerca y que para leer el periódico tienen que sostenerlo a la mayor distancia posible. Aún así, el problema visual queda corregido, ya que la potencia de refracción del visor se calibra de modo que los objetos situados a una distancia de un metro queden enfocados. Podrá ver con claridad y nitidez y no habrá nada que le impida hacer una fotografía estupenda.
Acuda con su cámara a un óptico optometrista
Si usted es de los que prefiere no quitarse las gafas, necesitará un tiempo para acostumbrarse. Cuando una persona está haciendo una fotografía, normalmente intenta fijar la vista lo más cerca posible del visor, pero llega un punto en que las lentes graduadas se convierten en un obstáculo. A su vez, esto conlleva otro problema: puesto que al ojo no le es posible acercarse tanto, puede ocurrir que su campo de visión sufra limitaciones de carácter leve. El rango intermedio aparece enfocado, pero la periferia se ve un poco borrosa. En este caso, un prisma especial que puede adquirir en un comercio especializado puede serle de ayuda, ya que le proporcionará una visión nítida, incluso en la periferia. Los usuarios de lentes progresivas también necesitarán un poco de práctica. En primer lugar deberán localizar la zona de las gafas a través de la que ven mejor cuando fotografían. Un consejo: si va a comprarse unas gafas nuevas y tiene previsto fotografiar a menudo con ellas puestas, es recomendable que cuando acuda al óptico optometrista se lleve la cámara con usted.
Un vidrio mineral de mayor calidad y un tratamiento adecuado
Si suele fotografiar con las gafas puestas, tenga presente que la superficie de sus gafas también sufre cuando entra en contacto con el visor. Según el material utilizado, es posible que con el tiempo aparezcan arañazos en las lentes graduadas, sobre todo, en las fabricadas con un plástico que no esté lo suficientemente protegido. Numerosos fabricantes de cámaras ofrecen copas oculares de goma especialmente blanda. Si usted lleva gafas debería prestar especial atención a este punto. Hoy en día, las lentes de plástico son mucho más robustas que las de tan solo unos años atrás, pero la lente sigue sufriendo. Si fotografía a menudo con las gafas puestas, debería utilizar unas lentes de vidrio mineral más robustas o bien solicitar a su óptico optometrista un tratamiento más resistente para las gafas.